Lunes 2 Noviembre

DIA DE TODOS LOS DIFUNTOS

 

Marcos 15,33-39;16,1-6
"Jesús, dando un fuerte grito, expiró"

Al llegar el mediodía, toda la región quedó en tinieblas hasta media tarde. Y, a la media tarde, Jesús clamó con voz potente: "Eloí, Eloí, lamá sabaktaní". (Que significa: "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?") Algunos de los presentes, al oírlo, decían: "Mira, está llamando a Elías." Y uno echó a correr y, empapando una esponja en vinagre, la sujetó a una caña, y le daba de beber, diciendo: "Dejad, a ver si viene Elías a bajarlo." Y Jesús, dando un fuerte grito, expiró. El velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo. El centurión, que estaba enfrente, al ver cómo había expirado, dijo: "Realmente este hombre era Hijo de Dios."

 

En el dìa de todos los difuntos la liturgia nos registra el evangelio de la muerte de Jesùs como para decirnos que en ese drama de la muerte Jesùs también nos precedió

 

¿Còmo nos veríamos nosotros ante la muerte si Jesùs, el Hijo de Dios no hubiera pasado por ahì ? No tendríamos palabras para justificar ese paso inevitable

 

Por eso Jesùs tenía que conocer ese drama en toda su crudeza

 

La escena es tan rica en detalles fuertes que invito a que hagamos una “aplicación de sentidos” a estilo ignaciano

 

Hagàmosnos presentes allì como uno màs entre aquella masa de gente fanatizada contra Jesùs, gente resignada impotente, gente sencillamente curiosa

 

Clavemos la mirada en Jesùs

 

No perdamos detalle en cada uno de sus gestos.Oigamos lo que dice.En un descuido de los soldados acerquémonos y toquemos sus pies

 

Abracemos a Marìa en silencio.Oigamos sus sollozos

 

Veamos por un momento a esos soldados envalentonados que se burlan y se ensañan contra Jesùs

 

Y con la mayor reverencia presenciemos el momento en el que nuestro Jesus dando un fuerte grito, expira…No sabemos què hacer…No nos dejan…Caemos de rodillas vueltos en làgrimas…

 

Oimos cuando el soldado dice”Realmente este hombre era Hijo de Dios”