Martes 1 Diciembre

 

Lucas 10,21-24
"Jesús, se lleno de la alegría del Espíritu Santo"

En aquel tiempo, lleno de la alegría del Espíritu Santo, exclamó Jesús: "Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y a los entendidos, y las has revelado a la gente sencilla. Sí, Padre, porque así te ha parecido bien. Todo me lo ha entregado mi Padre, y nadie conoce quién es el Hijo, sino el Padre; ni quién es el Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo se lo quiere revelar." Y volviéndose a sus discípulos, les dijo aparte: "¡Dichosos los ojos que ven lo que vosotros veis! Porque os digo que muchos profetas y reyes desearon ver lo que veis vosotros, y no lo vieron; y oír lo que oís, y no lo oyeron."

Verdaderamente que pocas veces nos ponemos a contemplar y dar gracias a Dios por las cosas que nos ha tocado vivir.Muchas cosas están por hacerse pero en otras se avanza

 

Pertenecemos a una generación que ha contemplado el esfuerzo por vivir con más autenticidad el mensaje de Jesús desde el Vaticano II

 

La Iglesia, aunque falta mucho para llevarlo a la práctica, pero ha hecho una opción preferencial por los pobres

 

Hoy conocemos las sagradas escrituras como no se pudo conocer en otras épocas

 

Nuestra Iglesia con todos sus defectos es hoy una Iglesia que avanza hacia su autenticidad

 

Nuestra iglesia está conociendo el martirio en algunos paìses

 

Nuestra Iglesia avanza hacia un incorporación màs amplia de laicado

 

Màs temprano que tarde veremos a la mujer haciéndose con el espacio que se merece en la dirección de la comunidad eclesial

 

El papado lucha por hacer que la perspectiva de la misericordia sea la que se imponga en la vida de la Iglesia

 

Nuestra Iglesia avanza hacia el ecumenismo con las otras iglesias

 

La Iglesia está comprometida con los derechos humanos, con los refugiados, los emigrantes

Los sacramentos para las parejas recasadas está por llegar

 

 La consideración digna hacia los homosexuales van por buen camino

 

Tantas otras podríamos enumerar, pero ya estas nos  pueden provocar un profundo agradecimiento a nuestro Dios por las cosas que estamos  viendo

Lo que le pedimos al Señor es que en todos estos campos se siga avazando, pero que estamos felices de ver ese despliegue del Padre, del Hijo y del Espiritu Santo en nuestro mundo de hoy