Jueves 10

 

Mateo 11,11-15
"No ha nacido uno más grande que Juan, el Bautista"

En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente: "Os aseguro que no ha nacido de mujer uno más grande que Juan, el Bautista; aunque el más pequeño en el reino de los cielos es más grande que él. Desde los días de Juan, el Bautista, hasta ahora se hace violencia contra el reino de Dios, y gente violenta quiere arrebatárselo. Los profetas y la Ley han profetizado hasta que vino Juan; él es Elías, el que tenía que venir, con tal que queráis admitirlo. El que tenga oídos que escuche."

 

El Reino de Dios es algo tan grande para Jesús, que siendo el Bautista el hombre más grande nacido de mujer, sin embargo es más pequeño que cualquiera que pertenezca al Reino

 

Cada vez que aparece el Reino volvemos a preguntarnos qué es ese Reino y seguimos teniendo que contentarnos con aproximaciones

 

Lo que si está fuera de dudas que con Jesús comienza el reino. Su llegada al mundo abre esa era para siempre

 

Lo otro que es innegable es que tiene que ver con una implantación de la voluntad, del designio del Padre sobre todo lo creado

 

Y además, por las parábolas de Jesús, el Reino es para felicidad del ser humano: “el tesoro hallado”, “la moneda de la ama de casa”, “la oveja encontrada”. Todo suena a alegría, a realización de un empeño

 

Lo más desconcertante es lo que dice Jesús de que el Reino ya está entre nosotros. Que con eso puede significar que está entre nosotros porque Él está entre nosotros o porque hay otras semillas del Reino entre nosotros

 

Está entre nosotros pero no completamente, porque en el “Padre Nuestro” nos invita a pedir “Venga a nosotros tu Reino”

 

De todas maneras sabiendo como sabemos que es un reino de paz y de justicia, ya vemos que ese Reino está por construirse y que va a depender de nosotros el que se termine de construir o no

 

Dispongámonos a conquistar  territorios para ese reino. La referencia para llegar a esa meta será el cumplimiento de la voluntad de Dios  bajo la guia de Jesús

 

Mientras tanto sigamos diciendo con toda devoción en el Padre Nuestro: ”Venga a nosotros tu Reino”