Domingo 20 septiembre

Marcos 9, 30-37 

" Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos."

En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos se marcharon de la montaña y atravesaron Galilea; no quería que nadie se enterase, porque iba instruyendo a sus discípulos. Les decía: "El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres, y lo matarán; y, después de muerto, a los tres días resucitará." Pero no entendían aquello, y les daba miedo preguntarle. Llegaron a Cafarnaún, y, una vez en casa, les preguntó: "¿De qué discutían por el camino?" Ellos no contestaron, pues por el camino habían discutido quién era el más importante. Jesús se sentó llamó a los Doce y les dijo: "Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos." Y, acercando a un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo: "El que acoge a un niño como éste en mi nombre me acoge a mí; y el que me acoge a mí no me acoge a mí, sino al que me ha enviado."

Una vez más Jesús presenta sin rodeos el estilo de la comunidad que está creando y el perfil del hombre que pertenece al seguimiento de sí mismo

Es impresionante la forma como hemos edificado toda una sociedad, toda una iglesia  y todo un perfil de ser humano que ostentan una negación casi frontal a lo que enseña Jesús

 

Y aquí no vale mirar hacia otro lado y comenzar a acusar a otros de incoherencia. Hay que mirar hacia sí mismo

 

¿ En Cuántos momentos de nuestra vida podemos recordar que hemos buscado intencional y conscientemente el último puesto?

 

Y en lo que se refiere  a tener a los niños como modelo y recibir y acoger a los más pequeños, tambien tenemos un motivo de inspiración muy especial

 

Ya en otra ocasión hemos ahondado en lo concerniente  a esa referencia a los niños como modelo a seguir en nuestra vida cristiana

 

En esa ocasión decíamos que las virtudes que nos tocaba seguir desde la referencia a los niños eran la capacidad de admiración, la facilidad para entablar relaciones gratuitas y cálidas, el perdón y el olvido de las ofensas, el goce de las cosas pequeñas, etc.

 

Asumamos toda esta catequesis del evangelio de hoy